La informalidad que caracteriza el trabajo doméstico ha permeado muy hondo en la cultura colombiana. Es común encontrar personas que desconocen totalmente los riesgos a que se expone una trabajadora doméstica. La enfermedad laboral puede ser más usual de lo que uno creería y es obligación legal del empleador evitarlas. La salud del trabajador es una responsabilidad tanto del empleado como del empleador. Aquí te contamos a qué enfermedad laboral o riesgos de trabajo se expone una empleada doméstica.
¿En el día a día, cómo se puede dar una enfermedad laboral en el trabajo doméstico?
En una de nuestras entradas anteriores explicamos algunos de los riesgos de una empleada doméstica:
- Sustancias tóxicas y superficies resbaladizas: esta es una de las principales fuentes de enfermedad laboral. Es fundamental el uso de guantes, uniforme y zapatos adecuados. Aquí entra en juego la dotación que es requerida por ley cuando se firma contrato laboral. Una forma de evitar la enfermedad laboral es entregarle los equipos y herramientas para el trabajo.
- Químicos corrosivos: ten cuidado con los productos que usas para lavar. Algunos productos para lavar superficies contienen fuertes químicos que, al mezclarse, provocan reacciones que pueden ser tóxicas para los seres humanos. De aquí se deriva una enfermedad laboral que puede ser un enorme riesgo tanto para el trabajador como para el empleador.
- Cargas pesadas: es demasiado común la enfermedad laboral asociada a una lesión por mala técnica al levantar objetos. Además, puede significar lesiones graves. Este representa uno de los principales riesgos laborales de la empleada doméstica. Ten en cuenta que las mujeres pueden cargar hasta 12,5 kilos, según lo determina la ley.
- Herramientas incorrectas: procura que tu empleada doméstica tenga todo lo que requiere para realizar su trabajo sin que implique un esfuerzo físico extra para ella. Una escoba, un trapero y un recogedor altos hacen que no deba forzar su espalda. Esto puede marcar la diferencia al momento de cuidar su salud.
Cuidar a tu empleada doméstica representa tener la tranquilidad y el respaldo de un trabajo bien hecho. Los diferentes riesgos laborales de la empleada doméstica deben ser entendidos por quien emplea y quien trabaja. Esto trae confianza a un lugar seguro para hacer su trabajo.
¿Cómo funciona el proceso de cubrimiento si mi empleada doméstica sufre una enfermedad laboral?
Esto es lo que más debe preocupar a las personas y empresas que tienen un contrato informal con sus empleadas y trabajadores domésticos. Por ley, el cubrimiento de un accidente o de una enfermedad laboral en un empleado doméstico se reparte entre el empleador y las ARL. Por ejemplo, un caso común de gastroenteritis o cefalea (dolor de cabeza) puede incapacitar a un trabajador hasta cinco días. El empleador, por ley, debe cubrir dos de esos días, mientras los otros días van por cuenta de la ARL. Esto aplica para cuando un trabajador está afiliado al sistema de salud.
La informalidad de una empleada doméstica generalmente hace que el empleador le pague en efectivo y se desentienda del tema. Sin embargo, por ley, es obligatorio que el empleador cumpla con todas sus obligaciones como contratante, incluyendo lo que implica un contrato laboral. Esto va en contra de lo que debe asumir el empleador por ley y se expone de una manera similar al trabajador cuando se trata de una enfermedad laboral. Si el trabajador sufre un percance que clasifica como accidente o una enfermedad laboral y no está afiliado al sistema de seguridad social y salud, el empleador podría ser multado. La penalidad a la que se expone un empleador puede llegar a 5000 salarios mínimos mensuales vigentes. A esto se incluye que, además, debe pagar los gastos médicos derivados de esa enfermedad laboral.
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