Encontrar al empleado ideal es una búsqueda que muchos creen imposible. Y, aunque sí es difícil y requiere de mucha paciencia, reclutar y mantener al empleado ideal no es tan complejo como parece. Mientras mantengas presentes la misión y visión de tu empresa, motivar y persuadir a la gente talentosa será más sencillo.
A continuación te traemos una serie de atributos que separan al trabajador ideal de los trabajadores promedio. No sobra decir que, si por un golpe de suerte ya cuentas con un empleado así, ¡valóralo, porque son una joya!
Atributos del empleado ideal
Disciplina y responsabilidad
El empleado ideal es aquel que entrega lo que debe entregar. Nunca sobra decirlo. El mercado laboral está plagado de trabajadores mediocres que hacen a duras penas lo que se les pide, e incluso lo asumen como un enorme esfuerzo. El empleado ideal es aquel que entiende el esfuerzo que requiere hacer una tarea por el bien colectivo de la empresa.
El reclutador, el dueño o el jefe directo, todos deben confiar ciegamente en que el trabajador cumplirá con lo que se le pide en el tiempo que se le pide, sin excusas.
Asertividad
Este se puede resumir como la mezcla perfecta de comunicación, iniciativa y actitud. El empleado ideal que es asertivo sabe cuándo debe dar sus opiniones. Sabe la manera correcta para hacerlo sin herir o pasar por encima de otros. También sabe que la motivación es una parte fundamental de desempeñar un buen trabajo.
Si encuentras un empleado o empleada asertivo o asertiva ¡no lo sueltes! Si equilibra bien su inteligencia emocional, social y racional, has dado en el blanco.
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Cooperación y trabajo en equipo
Este atributo es especialmente importante en empresas y equipos de trabajo pequeños. Nada frustra más en la operación de una empresa que un trabajador que no coopera o no ayuda cuando se le necesita. Las obligaciones deben estar bien definidas. Por eso mismo los trabajadores deben ser conscientes de que ayudarles a sus colegas y compañeros es el primer paso a un equipo funcional y fluido: muy productivo.
Ética e integridad
Es triste vivir en una época donde esto deba ser aclarado con los trabajadores. Un empleado ideal sigue siempre las normas establecidas para el bien vivir y no anda buscando cómo torcer las reglas para beneficiarse a sí mismo. Un comportamiento ejemplar, o simplemente civilizado y cuidadoso, son lo mínimo para evitar problemas de acoso, corrupción u otras prácticas muy perjudiciales para la empresa y la sociedad.
La integridad es clave y se muestra en todo su esplendor cuando una persona se ve obligada a tomar una decisión difícil. Haz ese tipo de preguntas a tus empleados o candidatos para saber un poco más sobre su espectro moral.
Seguridad y humildad
Estos dos rasgos son probablemente los más difíciles de encontrar. Un empleado ideal conoce su talento, sus habilidades, pero no tiene necesidad de jactarse de ellas. Los proyectos más fértiles vienen con equipos de trabajo que pueden poner a un lado sus diferencias y trabajar por el bien común. Un empleado con una autoestima alta, pero con un orgullo bajo, es realmente raro, pero garantizan un ambiente pacífico y muy positivo para la empresa.
Es más común encontrar trabajadores con una u otra de esas características. Cada una es muy valiosa para la empresa, así que: con cualquiera de las dos estás cubierto o cubierta.
Culturalmente apropiado
Un empleado que no se ajuste bien a la cultura de una empresa puede generar conflicto interno. Por ejemplo, no debe ser el mismo tipo de persona la que se ajuste con más flexibilidad a una empresa que tiene una mayoría de personal femenino, o viceversa. El empleado ideal sabe la cultura empresarial y actúa de manera correcta en sus interacciones con los demás. Por esto mismo, es vital que el empleado ideal conozca la visión y la cultura de la empresa.
Presentación impecable
Para todo jefe, director, dueño o gerente es indispensable tener empleados que puedan mostrar su negocio de la mejor forma posible a todos sus clientes. Por esto es clave que el empleado ideal tenga una imagen impecable. Nunca se sabe cuándo pueda representar a la empresa cuando se necesita.
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Posted by World Economic Forum on Tuesday, February 28, 2017
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