¿Eres de los que después de dos o tres días de tu servicio de limpieza ya tienes tu cocina patas arriba? No hay nada más gratificante que ver tu casa impecable, y para nadie es un secreto que ante la primera señal de caos o suciedad podemos colocar un grito en el cielo.
Un caso puntual a atender es la cocina. Hoy por hoy, es muy usual que ésta sea la primera área en verse de tu apartamento, o una de las más importantes para ti, no solo porque allí preparas tus alimentos, sino porque también es el centro de atención de tu casa. A continuación compartiremos este sencillo paso a paso, para que te sirva como guía de cómo mantener limpia tu cocina después de cada servicio.
No pases la noche con la loza sucia.
Este es un punto muy importante. La cocina se verá notoriamente más limpia si no hay loza sucia, tu mañana será más sencilla y tendrás más disponibilidad de utensilios para ti y las personas con quienes vives.
Siempre limpia la campana y la estufa después de usarlos.
Muchas veces cocinamos y decimos: “Mañana lo limpio” o “Luego viene la muchacha”, pero ten en cuenta que pensar así hace que nuestra cocina sea más difícil de limpiar. Por ejemplo si has freído tus alimentos, es mejor limpiar de inmediato los utensilios que hayas usado que dejar pasar varios días para hacerlo, ya que cuando la grasa se seque va a ser más difícil de quitar.
Guarda todo en su lugar después de usarlo.
Créeme, esta es una de las cosas que más hace desorden no solo en tu cocina, sino en toda tu casa. Tener en cuenta este punto es vital. Si usas algo lo limpias y lo guardas de inmediato, así vas a conservar el orden siempre.
Mantén limpio el mesón.
Cada vez que hagas algo, pasa un trapito con un poco de desinfectante o quita grasa de la marca de tu preferencia. Esto no sólo conservará tu mesón por más tiempo y mantendrá las bacterias lejos, sino que también hará lucir tu cocina siempre limpia.
Barrer todas las noches.
¡El suelo es vital! Puedes tener muy limpio todo en tu cocina, y en tu casa en general, pero si el suelo no está limpio, el orden se notará poco. Por eso te aconsejamos que barras siempre en la noche, así amanecerás con una cocina 100% limpia.
Mantener una “canequita” junto al lavaplatos.
Una basura pequeña o canequita, te permitirá controlar mejor los residuos de tu cocina y podrás tener más orden en tu basura. ¡Además te ayuda a reciclar! Puedes tener en esta basura los desechos de comida que, por lo general, son los que más fuerte huelen.
Sacar la basura.
Acumular la basura traerá moscas y malos olores. Por eso es bueno tener el orden que nombramos en el punto anterior, y tener muy claro los días en los que se puede sacar la basura para evitar este tipo de molestias.
Lava mientras cocinas.
Si eres de los que después de cocinar dejas la cocina como un campo de batalla, este es un excelente consejo para ti. Si aprovechas los pequeños huecos mientras cocinas, es muy probable que no te quede una cocina tan sucia. Supongamos que estás haciendo un arroz y ya no vas a usar más la tabla de picar, es algo que podrías lavar sin problema mientras sigues la cocción de tus alimentos.
Lava a diario “el trapito” de la cocina.
Todos tenemos un trapito en nuestras cocinas que básicamente hace de todo. ¡Y es que resulta muy útil! Para dar un mejor uso a estos elementos, primero debemos dar una tarea a cada trapito, esto es vital para cuidar los olores de nuestra cocina. Te recomendamos siempre tener uno para secar y otro para limpiar; el trapo de limpiar debes lavarlo todas las noches, esto evitará que tu cocina tome malos olores.
Cloro + Agua caliente.
Para terminar, es bueno que todas las noches antes de irte a la cama y que ya hayas hecho todas las tareas de la cocina, calientes dos tazas de agua y en esta medida diluye media taza de cloro. Agrega la mezcla al desagüe de tu lavaplatos, esto te dará una prevención para que no se tape y también lo desinfectará.
Esperamos te sean de utilidad estos diez consejos, no hace falta seguir el paso a paso al pie de orden, pero cumplirlo si te garantizará una cocina más limpia.